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Reflexiones desde El Cursillo Jesús condenado a muerte ¿Por qué?

Jesús entró en conflicto con los círculos dirigentes de su pueblo, con su mensaje y con su doctrina.Se relacionaba con los marginados, sus inobservancias de las prescripciones legales sobre el día sábado fueron escandalosas; pero el escándalo decisivo que Jesús provocó fue por su actuar...

Jesús entró en conflicto con los círculos dirigentes de su pueblo, con su mensaje y con su doctrina.Se relacionaba con los marginados, sus inobservancias de las prescripciones legales sobre el día sábado fueron escandalosas; pero el escándalo decisivo que Jesús provocó fue por su actuar en nombre y en lugar de Dios.Quiso entender y cumplir la ley en su sentido originario sin despreciar a ningún hombre.El hecho de que proclamase el amor paterno de Dios y su perdón a todos, fue algo que los mezquinos guardianes de la doctrina oficial lo entendieron como un ataque a los fundamentos de la fe, y como una traición a la santa causa de Israel.El conflicto se agudizó cuando Jesús pasó de Galilea a Jerusalén y empezó a vérselas con los saduceos y los grandes sacerdotes que allí dominaban.Vieron en Jesús un peligro para el ordenamiento cultural y político que ellos habían logrado para su poder personal.Jesús fue condenado a muerte por el procurador romano. El tipo de ejecución romana que era la crucifixión se reservaba para los esclavos y los insurrectos, estaba considerada como la pena más cruel y oprobiosa.Jesús enfrentó la fuerza del poder y claro, el odio de los poderosos, enfrentó las calumnias, la traición de uno de sus escogidos, la cobardía de sus apóstoles, la ingratitud de los que había socorrido; se enfrentó a las burlas y humillaciones, se sintió solo y abandonado y a pesar de todo esto siguió amándonos y perdonándonos.Ya vamos nuevamente a vivir la Semana Santa, y el mundo católico llenará las iglesias, una multitud de fieles acompañará en la procesión del Santo Sepulcro, todos los actos religiosos estarán muy concurridos.Pero eso no es todo, es necesario acercarnos al Señor, es necesario escuchar sus palabras, es necesario tomar nuestra cruz y caminar con Él mientras dure nuestro peregrinar.Acercarnos a Jesús es dejar de enriquecerse ilícitamente, es honradez, es sacrificio, es entrega, es servicio, es donación.Acercarse a Jesús es entrega al prójimo en los buenos y malos momentos de la vida y no pasar indiferente ante el dolor ajeno.Somos sus hijos y los hijos participan del todo de sus padres, así también nosotros ¿no nos tocará una astilla de su cruz?Pero también acercarse a Jesús es gozo, alegría, paz, sentirse protegido, amado y perdonado.Aprovechemos este tiempo de Cuaresma para cambiar, es decir cambiar mejorando en lo que sabemos que fallamos, no es imposible ser mejores de lo que somos, no es imposible ser más justos, más pacientes, más comprensivos, más responsables, en una palabra mejorar.Mejorar significa también ser coherentes en nuestra vida y en nuestra fe, no podemos separar nuestra forma de vivir de nuestra fe, de nuestro cristianismo. Dios debe estar presente en nuestra vida, no podemos apartarlo y solamente admitir su presencia en los actos religiosos, esto sería hipocresía, o con Cristo o contra Cristo. “No se puede servir a dos señores, a Dios y al dinero”. Seamos auténticos hijos de Dios.

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