La COB en Tarija

en Tarija, es un evento importante y no sólo porque su secretario de relaciones públicas, Sebastián Morales, haya dicho que “esto traerá movimiento económico a la ciudad, en el caso de hospedaje, alimentación, visitas a lugares turísticos y demás temas de comercio económico”.Dijeron...

en Tarija, es un evento importante y no sólo porque su secretario de relaciones públicas, Sebastián Morales, haya dicho que “esto traerá movimiento económico a la ciudad, en el caso de hospedaje, alimentación, visitas a lugares turísticos y demás temas de comercio económico”.Dijeron los organizadores del congreso cobista, que vendrían unos 800 delegados titulares, de todo el país, y que las deliberaciones se extenderán toda la semana, probablemente hasta el sábado.Y aunque la elección de su nuevo Comité Ejecutivo Nacional parece ser el tema central de la reunión, hay varios otros de quizás mucha mayor relevancia, como la ya planteada idea de convertir la que hasta ahora es una entidad sindical, en un partido político, con lo cual definiría totalmente su intención de llegar a ser gobierno y dejar ese ámbito de organización no gubernamental, en el cual todavía muchos acomodan a la COB, a pesar de análisis teóricos que la situaron en algún momento como protagonista del “poder dual”.Lo que se diga ahora, sin embargo, en forma anticipada, es solo especulación, porque tendrán que ser los congresistas acreditados y legitimados quienes definan el rumbo y el objetivo de sus deliberaciones. Y hay natural expectativa por lo que pueda resultar.Aunque el origen de la COB, determinado por la lucha política y sindical de los trabajadores mineros y de los fabriles, inicialmente, es nítido, en los últimos tiempos diversas circunstancias han cambiado  su esencia y su entorno.Primero, es evidente que la reproducción de la fuerza trabajo en Bolivia (como en varios otros países) ya no se cumple únicamente por la vía del salario. Dicen las estadísticas aceptablemente confiables que más del 60% de la población ocupada urbana trabaja en el sector informal.Hay que considerar, también, que la mayoría del empleo asalariado (83%) trabaja en empresas pequeñas con menos de 10 trabajadores, eso hace que esta población no esté organizada sindicalmente. Esos tres elementos, centralidad del salario, población que trabaja en el sector informal y población asalariada sin sindicato, según varios analistas relativiza la importancia de la organización matriz de los trabajadores, dado que ellos siguen con la misma estructura de representación.Pero eso, de ninguna manera significa que no sea uno de los actores más importantes en el ámbito social y colateralmente en el político, aún sin convertirse en partido político, como ya lo han sugerido.Eso tendrán que tener muy en cuenta los congresistas, que se encontrarán con la tradicional y ampliamente reconocida hospitalidad tarijeña, pero tendrán que disfrutarla sin distraer los objetivos principales de su reunión, que son determinantes para la existencia misma del sindicalismo boliviano. Nuestros mejores augurios para ellos.

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