Organizaciones exigen al gobierno abrogar 6 leyes
Tras los incendios en la Chiquitanía que dejaron casi cuatro millones de hectáreas devastadas, se generaron pronunciamientos de rechazo a normas consideradas peligrosas para el ecosistema. Hace unas horas, 26 instituciones y organizaciones civiles se unieron y emitieron un pedido de abrogación...



Tras los incendios en la Chiquitanía que dejaron casi cuatro millones de hectáreas devastadas, se generaron pronunciamientos de rechazo a normas consideradas peligrosas para el ecosistema. Hace unas horas, 26 instituciones y organizaciones civiles se unieron y emitieron un pedido de abrogación de seis normas, que entre otros puntos permiten y avalan las quemas y desmontes de bosques.
En esa línea el pedido fue dirigido a las autoridades gubernamentales para la “abrogación de normativas vigentes y otras disposiciones legales de carácter local que son incoherentes con la Constitución Política del Estado, la Ley 071 de Derechos de la Madre Tierra y la Ley 300 Marco de la Madre Tierra y Desarrollo Integral para Vivir Bien y que promueven la expansión de la frontera agrícola basada en prácticas devastadoras y peligrosas como la quema y desmonte de bosques y modificación de otros ecosistemas”, detalla el documento.
Las normas que exigen que sean abrogadas son:
- Ley N° 337, Ley de Apoyo a la Producción de Alimentos y Restitución de Bosques y el Decreto Supremo 1578, reglamentario.
- Ley N° 502, Ley N° 739 y Ley N° 952, de ampliaciones del plazo y modificaciones de la Ley 337.
- Ley N° 741, Ley de Autorización de Desmonte hasta 20 hectáreas para pequeñas propiedades y propiedades comunitarias o colectivas para actividades agrícolas y pecuarias.
- Ley N° 1171, Ley de Uso y Manejo Racional de Quemas.
- Decreto Supremo 3973 de Modificación y Ampliación del Desmonte para actividades agropecuarias en tierras privadas y comunitarias.
- Ley N° 1098 y D.S. 3874 sobre autorización de producción de eventos de soya transgénica asociada a la producción de biodiesel.
Entre agosto y octubre del pasado año se registraron incendios de magnitud en el sector del oriente del país, sumando casi cinco millones de hectáreas quemadas en la Amazonia y Chiquitanía. Previamente a esto se aprobaron normas de incremento de la frontera agrícola y aprobación de quemas “controladas” en esas regiones, lo que para muchos fue parte de las causantes de los incendios.
Este pronunciamiento detalla también el rechazo a la ley del Plan de Uso del Suelo (PLUS) del Departamento del Beni aprobada el pasado 17 de octubre de 2019 por la Asamblea Legislativa, mediante Ley Departamental. Esta norma que amplía la frontera agrícola, zonifica en cinco categorías y nueve subcategorías el uso del territorio en esa región.
“El PLUS Beni 2019 pretende forzar el incremento del rendimiento de estas tierras y otras de baja aptitud para la actividad agropecuaria para convertirlas en suelos aptos para la agricultura y la cría extensiva de ganado, drenando áreas de inundación (temporal y permanente) y usando tecnologías para modificar la aptitud del suelo, lo cual contraviene el espíritu del PLUS como instrumento técnico normativo del ordenamiento territorial y genera profundas inconsistencias metodológicas, que cuestionan la transparencia en su elaboración y su legitimidad”, apunta el comunicado.
Este pedido de abrogación a las seis normas y rechazo al PLUS del Beni fue emitido por varias instituciones, entre ellas los colegios de Biólogos de La Paz, Cochabamba, Santa Cruz y Pando; el Colegio de Ingenieros Ambientales de Chuquisaca, Colegio de Ingenieros Forestales de Santa Cruz, Colegio de Ingenieros Agrónomos y Profesionales en Ciencias Agropecuarias de Bolivia,. Museo Noel Kempff Mercado, Red de Biodiversidad, Recursos Naturales y Medio Ambiente, Plataforma Nacional de Suelos para una Agricultura Sostenible, Centro para el Desarrollo y el Medio Ambiente (CDE) de la Universidad de Berna (Suiza), entre otras.
Los incendios en Bolivia dejaron a su paso la pérdida de miles de hectáreas además de la muerte de cientos de animales. A esto se suma la muerte de efectivos, quienes en el afán de sofocar el fuego terminaron perdiendo sus vidas.