Unión Europea reduce ayuda humanitaria y de desarrollo
La Unión Europea (UE) acortó en un 4,0 por ciento la ayuda humanitaria y de desarrollo en 2017 con respecto al año anterior, revelaron ayer organizaciones no gubernamentales, vinculadas con proyectos de cooperación. Con motivo del Día de Erradicación de la Pobreza, el informe AidWatch...



La Unión Europea (UE) acortó en un 4,0 por ciento la ayuda humanitaria y de desarrollo en 2017 con respecto al año anterior, revelaron ayer organizaciones no gubernamentales, vinculadas con proyectos de cooperación.
Con motivo del Día de Erradicación de la Pobreza, el informe AidWatch 2017 refirió que el gasto se redujo por primera vez desde 2012 y, de acuerdo con los datos, se necesitarían otros 40 años para alcanzar el objetivo acordado del 0,7 por ciento de Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD). La Unión Europea continúa como mayor donante en el mundo, pero solo Dinamarca, Luxemburgo, Suecia y el Reino Unido superaron el compromiso. Con los mayores recortes en su presupuesto aparecen España, junto con Austria, Hungría y las propias instituciones europeas, reflejó el estudio.
Si se continúa con esta tendencia, los 28 Estados miembros no alcanzarían la meta hasta 2052, pasados 20 años del propósito, una vez restada la ‘ayuda inflada’.
Ayuda inflada
La ayuda inflada es aquella que se computa oficialmente, como la condonación de deuda a otros países, pero que no se destina realmente a labores humanitarias.
Las organizaciones, agrupadas bajo el nombre de Concord Europa, coincidieron en señalar que con la llegada a la Casa Blanca del presidente estadounidense, Donald Trump, se inauguró una nueva época de unilateralismo y, en ese contexto, el desarrollo internacional y el sistema de ayuda están bajo la mayor presión de la historia.
Los países que conforman la Unión Europea fallan en su respuesta, hace falta más compromiso hacia la erradicación de la pobreza y el desarrollo sostenible global, consideraron. Los nuevos objetivos políticos del bloque comunitario -que responden a su agenda doméstica- amenazan con erosionar los principios de eficacia de la ayuda y con anular el impacto de las acciones, advierte el documento.
Según el informe de Concord, el declive en la ayuda de la Unión Europea está “altamente relacionado” con el descenso de gastos en materia de refugiados y la reducción de deuda reportada como AOD, que bajaron respectivamente un 10 % y un 82 % con respecto al 2017.
Con motivo del Día de Erradicación de la Pobreza, el informe AidWatch 2017 refirió que el gasto se redujo por primera vez desde 2012 y, de acuerdo con los datos, se necesitarían otros 40 años para alcanzar el objetivo acordado del 0,7 por ciento de Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD). La Unión Europea continúa como mayor donante en el mundo, pero solo Dinamarca, Luxemburgo, Suecia y el Reino Unido superaron el compromiso. Con los mayores recortes en su presupuesto aparecen España, junto con Austria, Hungría y las propias instituciones europeas, reflejó el estudio.
Si se continúa con esta tendencia, los 28 Estados miembros no alcanzarían la meta hasta 2052, pasados 20 años del propósito, una vez restada la ‘ayuda inflada’.
Ayuda inflada
La ayuda inflada es aquella que se computa oficialmente, como la condonación de deuda a otros países, pero que no se destina realmente a labores humanitarias.
Las organizaciones, agrupadas bajo el nombre de Concord Europa, coincidieron en señalar que con la llegada a la Casa Blanca del presidente estadounidense, Donald Trump, se inauguró una nueva época de unilateralismo y, en ese contexto, el desarrollo internacional y el sistema de ayuda están bajo la mayor presión de la historia.
Los países que conforman la Unión Europea fallan en su respuesta, hace falta más compromiso hacia la erradicación de la pobreza y el desarrollo sostenible global, consideraron. Los nuevos objetivos políticos del bloque comunitario -que responden a su agenda doméstica- amenazan con erosionar los principios de eficacia de la ayuda y con anular el impacto de las acciones, advierte el documento.
Según el informe de Concord, el declive en la ayuda de la Unión Europea está “altamente relacionado” con el descenso de gastos en materia de refugiados y la reducción de deuda reportada como AOD, que bajaron respectivamente un 10 % y un 82 % con respecto al 2017.