Tres departamentos prevén reducir contaminación del río Pilcomayo
La contaminación del río Pilcomayo se debe disminuir con planes y programas coordinados entre todos los departamentos de la cuenca; el secretario de Medio Ambiente de la Gobernación, Pablo Avilés, indicó que la gestión pasada se realizaron tres reuniones consecutivas en la ciudad de Sucre,...
La contaminación del río Pilcomayo se debe disminuir con planes y programas coordinados entre todos los departamentos de la cuenca; el secretario de Medio Ambiente de la Gobernación, Pablo Avilés, indicó que la gestión pasada se realizaron tres reuniones consecutivas en la ciudad de Sucre, de las cuales también participaron legisladores departamentales de Tarija representando al pueblo Weenhayek.
“Se conversó sobre qué planes y proyectos está ejecutando cada departamento para evitar la contaminación del Pilcomayo, Chuquisaca está trabajando bastante bien, en Tarija hemos coordinado con la Trinacional realizando recorridos con tres municipios, tanto El Puente, Entre Ríos y parte de Yacuiba que están involucrados en esto para ver de qué manera vamos a poder trabajar”, dijo.
Avilés lamentó que el departamento de Potosí no cuente con ningún tipo de plan o programa para controlar la contaminación del río Pilcomayo a pesar de ser “el departamento que más contamina” debido a la presencia de sus minas.
Trinacional
La cuenca del río Pilcomayo es una cuenca trinacional, que abarca territorios de Bolivia, Paraguay y Argentina, en los que residen 1,5 millones de personas
“La contaminación no nace donde termina el río, empieza en las cabeceras de las cuencas, Potosí está en esta posición y contamina bastante, no tiene programas y eso es lo penoso; hace un mes atrás invitamos a Potosí y Chuquisaca para ver este tema”, señaló.
La coordinación con representantes del pueblo Weenhayek en la Asamblea Legislativa Departamental de Tarija (ALDT) para ejecutar esta reunión y analizar las formas para involucrar al departamento de Potosí y colaborar a la descontaminación del Pilcomayo.
De esta manera, se pretende que los tres departamentos, Potosí, Chuquisaca y Tarija, trabajen de forma coordinada con la elaboración de planes para evitar mayores índices de contaminación al Pilcomayo.
Por su parte, el secretario de los Pueblos Indígenas de la Gobernación de Tarija, Felipe Moza, afirmó el mes pasado que no se pudo concretar una reunión con representantes de Potosí para tratar el tema de la contaminación en el Pilcomayo.
En dicha reunión se debía tratar las licencias ambientales con las que trabajan alrededor de unas 40 empresas mineras en este departamento.
Controlan tamaño del sábalo
El secretario de Medioambiente de la Gobernación de Tarija, Pablo Avilés, explicó que los pescados del Pilcomayo deben ser sacados en base a una normativa que indica que deben contar con una medida de 33 centímetros de longitud, por lo que se encuentran ejecutando operativos en coordinación con el programa Conservación y Desarrollo de la Fauna (Codefauna) para evitar la explotación del sábalo más pequeño.
“Hemos estado haciendo diferentes controles en los municipios, Yacuiba y Villa Montes con Codefauna para evitar que se explote el sábalo de diámetros menores. Este trabajo se ha estado socializando con el pueblo Weenhayek porque ellos viven de la pesca, la economía en el país no está tan buena”, indicó.
Tanto los pescadores como los comerciantes de sábalo, son “conscientes” que el pescado actualmente está con diámetros pequeños y es escaso, situación que es provocada por la sobre explotación de la fauna piscícola del Pilcomayo.
Para evitar este escenario, Avilés aseveró que el trabajo de conciencia en los municipios y el pueblo Weenhayek a través de los equipos técnicos de esta secretaría y Codefauna, es fundamental, tampoco se descarta acortar el tiempo de la explotación del sábalo.
Argentina investiga contaminación del Pilcomayo
El pasado 12 de febrero, el portal del Defensor del Pueblo de la Nación en Argentina informó que se detectaron problemas en el acceso a la información pública ambiental en el río Pilcomayo relativa a las concentraciones de metales pesados y otros contaminantes en el agua y lecho del mismo, como arsénico, plomo, cadmio, mercurio, zinc, antimonio, cobre y estaño en concentraciones superiores a las normales o a las aceptables para el consumo humano del agua y los peces.