Multan al colegio que discriminó a alumno gay
El Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología de Salta resolvió ayer miércoles establecer que el colegio privado en el que un joven de cuarto año sufrió hostigamiento por ser gay incurrió en discriminación, le aplicó una multa y le ordenó implementar a partir del año que viene un...
El Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología de Salta resolvió ayer miércoles establecer que el colegio privado en el que un joven de cuarto año sufrió hostigamiento por ser gay incurrió en discriminación, le aplicó una multa y le ordenó implementar a partir del año que viene un programa de capacitación en Derechos Humanos.
Se trata de la resolución 10202, que deja establecido en su segundo artículo que el colegio Santa María, de la capital salteña, incurrió “en un acto de discriminación” en perjuicio del joven Santiago Coraita, de 16 años, quien en 2018 cursó el cuarto año del secundario en esa institución.
La semana pasada, el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, ordenó al Ministerio de Educación salteño que intervenga en este caso de discriminación hacia un alumno que sufrió hostigamiento por ser gay de parte de autoridades del colegio Santa María, que además sancionaron y decidieron no renovar la matrícula 2019 a cuatro estudiantes que le dieron su respaldo.
Además, los padres de los cinco alumnos se reunieron con las autoridades de la cartera educativa y realizaron las presentaciones correspondientes para el tratamiento de este tema.
Santiago recibió en septiembre un llamado de atención por llevar una pulsera con la bandera de la comunidad LGBT.
Las autoridades de la institución convocaron al joven a una reunión, en la que lo acusaron de violar los valores del colegio y de provocar a través de su actitud, lo que motivó que cuatro compañeros se pintaran la bandera LGBT en sus brazos en solidaridad con Santiago y difundieran ese gesto a través de fotos en redes sociales.
En una de las imágenes aparecía un signo de “fuck you” al escudo del colegio, que se veía en una remera, con la leyenda “Fuck what they think” (que no te importe lo que ellos piensen).
La institución decidió entonces sancionar con 14 amonestaciones a los cuatro estudiantes y días después, aun con el pedido de disculpas de los alumnos, se les informó que no les renovarán la matrícula en 2019, haciendo valer el derecho de admisión.
En la resolución firmada durante esta jornada por la ministra Analía Berruezo, el ministerio le ordenó al establecimiento la implementación a partir del año que viene, de un programa de capacitación en derechos humanos, “con especial énfasis en el principio de igualdad y no discriminación”, dirigido a “personal jerárquico, tutores y docentes”.
Por otro lado, se le ordenó al colegio que adopte las medidas necesarias en el plazo de cinco días, para garantizar la rematriculación de los alumnos excluidos para el año que viene, o a opción de sus representantes legales, a conceder el respectivo pase a otra institución. Finalmente, con la resolución se le aplica una multa de diez veces el arancel o cuota abonado por alumno, que deberá hacerse efectiva en diez días hábiles desde la notificación.