Los traumas tienen solución
Para muchos especialistas, el trauma o estrés postraumático es una de las formas más severas e incapacitantes de estrés al que puede enfrentarse el ser humano. Pero, ¿en verdad se puede superar un trauma? Gracias a la investigación y la experiencia con afectados hoy podemos decir que sí....
Para muchos especialistas, el trauma o estrés postraumático es una de las formas más severas e incapacitantes de estrés al que puede enfrentarse el ser humano. Pero, ¿en verdad se puede superar un trauma? Gracias a la investigación y la experiencia con afectados hoy podemos decir que sí. Los traumas se curan y el miedo se supera. Es necesario seguir avanzando, pero hoy al fin contamos con modelos eficaces para ayudar a este tipo de víctimas.
A tomar en cuenta
Por un lado, muchos de nosotros tenemos traumas del pasado: situaciones dolorosas que vivimos hace tiempo y que siguen vivas en nuestro interior. Y son un peso que no nos dejan vivir tranquilos.
Los traumas que se van produciendo en situaciones puntuales de la vida son los que van creando nuestros problemas. Y superarlos es la clave para poder vivir en realmente paz. Es importante entender bien que los problemas, sean del tipo que sean, siempre aparecen en nuestra vida como resultado de un trauma.
Una determinada persona, por su genética y su forma de ser, puede tener más o menos predisposición a tener unos problemas u otros; pero no son los genes los que hacen que aparezcan los problemas. Los detonantes que hacen que se manifiesten los problemas son los traumas.
Por ejemplo, una persona puede tener un carácter que predispone a la timidez, pero no será tímido, ni sufrirá por ello, si en ningún momento de su vida vive ninguna situación dolorosa en su relación con los demás. En cambio, en el momento en que sufra algún trauma en el que se sienta desplazado o humillado, su timidez tomará forma.
Así que, sean cuales sean los problemas que te preocupan en tu vida, seguro que hay situaciones dolorosas de tu pasado relacionados con ellos.
A tomar en cuenta
Por un lado, muchos de nosotros tenemos traumas del pasado: situaciones dolorosas que vivimos hace tiempo y que siguen vivas en nuestro interior. Y son un peso que no nos dejan vivir tranquilos.
Los traumas que se van produciendo en situaciones puntuales de la vida son los que van creando nuestros problemas. Y superarlos es la clave para poder vivir en realmente paz. Es importante entender bien que los problemas, sean del tipo que sean, siempre aparecen en nuestra vida como resultado de un trauma.
Una determinada persona, por su genética y su forma de ser, puede tener más o menos predisposición a tener unos problemas u otros; pero no son los genes los que hacen que aparezcan los problemas. Los detonantes que hacen que se manifiesten los problemas son los traumas.
Por ejemplo, una persona puede tener un carácter que predispone a la timidez, pero no será tímido, ni sufrirá por ello, si en ningún momento de su vida vive ninguna situación dolorosa en su relación con los demás. En cambio, en el momento en que sufra algún trauma en el que se sienta desplazado o humillado, su timidez tomará forma.
Así que, sean cuales sean los problemas que te preocupan en tu vida, seguro que hay situaciones dolorosas de tu pasado relacionados con ellos.