Los incendios en Chile se hacen sentir
La región de Valparaíso continúa en alerta roja por la persistencia de por lo menos tres focos sin control de incendios que ya consumieron más de 2500 hectáreas de pastizales y bosques. Este domingo las llamas calcinaron tres viviendas y un almacén en la periferia de la ciudad de...
La región de Valparaíso continúa en alerta roja por la persistencia de por lo menos tres focos sin control de incendios que ya consumieron más de 2500 hectáreas de pastizales y bosques.
Este domingo las llamas calcinaron tres viviendas y un almacén en la periferia de la ciudad de Valparaíso, mientras que decenas de compañías de bomberos, voluntarios e incluso vecinos de las áreas en peligro tratan de alejar el fuego de las zonas habitadas.
No se han reportado personas fallecidas o lesionadas por los siniestros pero si han sido evacuadas cientos de familias y más de cuatro mil clientes permanecían sin servicio de agua, para facilitar el abastecimiento del líquido a los cuerpos de bomberos.
En el combate a las llamas también participan casi una veintena de aviones y helicópteros.
Las casas destruidas se encontraban en la parte alta de Valparaíso, en las cercanías del centro penitenciario de la ciudad y para garantizar la seguridad de los pobladores la Oficina Naional de Emergencias (Onemi) dispuso la evacuación de los habitantes de varios sectores que peligran por los fuertes vientos que se mantienen en la región.
La intendencia de la región informó que la labor de los bomberos se ha enfocado en evitar que el fuego llegue a la parte baja de la ciudad de Valparaíso, gran parte de la cual está afectada por una densa humareda.
Autoridades piden al Gobierno tomar medidas más fuertes para evitar que se propague el fuego.
La temporada de incendios forestales que cada año afectan a Chile, parece haberse adelantado en esta ocasión, favorecida por la sequía más fuerte de las últimas décadas y por temperaturas que sobrepasan los 34 grados centígrado, inusualmente altas para esta época.
Este domingo las llamas calcinaron tres viviendas y un almacén en la periferia de la ciudad de Valparaíso, mientras que decenas de compañías de bomberos, voluntarios e incluso vecinos de las áreas en peligro tratan de alejar el fuego de las zonas habitadas.
No se han reportado personas fallecidas o lesionadas por los siniestros pero si han sido evacuadas cientos de familias y más de cuatro mil clientes permanecían sin servicio de agua, para facilitar el abastecimiento del líquido a los cuerpos de bomberos.
En el combate a las llamas también participan casi una veintena de aviones y helicópteros.
Las casas destruidas se encontraban en la parte alta de Valparaíso, en las cercanías del centro penitenciario de la ciudad y para garantizar la seguridad de los pobladores la Oficina Naional de Emergencias (Onemi) dispuso la evacuación de los habitantes de varios sectores que peligran por los fuertes vientos que se mantienen en la región.
La intendencia de la región informó que la labor de los bomberos se ha enfocado en evitar que el fuego llegue a la parte baja de la ciudad de Valparaíso, gran parte de la cual está afectada por una densa humareda.
Autoridades piden al Gobierno tomar medidas más fuertes para evitar que se propague el fuego.
La temporada de incendios forestales que cada año afectan a Chile, parece haberse adelantado en esta ocasión, favorecida por la sequía más fuerte de las últimas décadas y por temperaturas que sobrepasan los 34 grados centígrado, inusualmente altas para esta época.