Experto: la Chiquitanía se recuperará en cinco años
El responsable del equipo de Protección Civil de Mecanismo Europeo, Iván Herrera, señaló que el bosque de la Chiquitanía tardará unos 5 años en recuperarse, pero que es necesario trabajar en tareas prevención para evitar nuevos focos de calor. “Lo que se ha perdido hasta ahora es...
El responsable del equipo de Protección Civil de Mecanismo Europeo, Iván Herrera, señaló que el bosque de la Chiquitanía tardará unos 5 años en recuperarse, pero que es necesario trabajar en tareas prevención para evitar nuevos focos de calor.
“Lo que se ha perdido hasta ahora es pequeño en comparación a la totalidad de lo que se ha quemado, pero la generalidad del paisaje estará recuperada en pocos años”, aseguró el experto que trabaja en labores de coordinación para apagar el incendio en la Chiquitanía.
Alertó que para evitar hechos similares hay que construir defensivos: “Como en el monte o en el bosque no hay líneas de defensa naturales hay que crear cortafuegos, ensanchar los caminos y hacer brechas con maquinaria pesada para que el fuego llegue solo hasta ahí. Con esa defensa podremos parar el fuego”.
A pesar que estas medidas de prevención son las más indicadas, considera que cada país se debe adaptar a sus circunstancias.
Sobre la cantidad de incendios, dijo que “hay que tener en cuenta que las circunstancias en esta temporada han sido extremas, un periodo que registra las peores sequías en Bolivia y en todos los países de la región”.
“Por más que uno intente hacer bien las cosas al final puede salir algo mal. Es una pena ver los campos quemados y la pérdida de vegetación, pero hay que tomar en cuenta que esta zona de bosque tropical seco está habituado a este tipo de sequías y va a sobrevivir. En pocos años la inmensa mayoría del paisaje estará como estaba”, aseguró.
El objetivo del trabajo de su equipo es dar respuesta urgente a la emergencia, facilitar la coordinación y cooperación de las brigadas que llegaron de Francia, Austria, Bélgica, Suecia y otros para su correcta distribución.
“La misión del equipo es facilitar la coordinación que las autoridades bolivianas a fin de que solo tengan un interlocutor, que solo hablen con nosotros para que nos comuniquemos con los países que envían ayuda y así sea más efectiva. Muchos interlocutores solo van a complicar la ayuda que estamos brindando”, explicó.
Este equipo está conformado por ocho personas, dos de ellas a cargo de las comunicaciones y el enlace para remitir decisiones y recibir información de lo que se recibe de otros países, y seis centradas en la coordinación y el análisis del comportamiento del fuego para establecer si es que amerita mayor cooperación.
Ayuda
Mientras tanto, la ayuda sigue llegando al país para sofocar los incendios en la Chiquitanía. Ayer arribó de Colombia un avión con material para combatir el fuego.
“Lo que se ha perdido hasta ahora es pequeño en comparación a la totalidad de lo que se ha quemado, pero la generalidad del paisaje estará recuperada en pocos años”, aseguró el experto que trabaja en labores de coordinación para apagar el incendio en la Chiquitanía.
Alertó que para evitar hechos similares hay que construir defensivos: “Como en el monte o en el bosque no hay líneas de defensa naturales hay que crear cortafuegos, ensanchar los caminos y hacer brechas con maquinaria pesada para que el fuego llegue solo hasta ahí. Con esa defensa podremos parar el fuego”.
A pesar que estas medidas de prevención son las más indicadas, considera que cada país se debe adaptar a sus circunstancias.
Sobre la cantidad de incendios, dijo que “hay que tener en cuenta que las circunstancias en esta temporada han sido extremas, un periodo que registra las peores sequías en Bolivia y en todos los países de la región”.
“Por más que uno intente hacer bien las cosas al final puede salir algo mal. Es una pena ver los campos quemados y la pérdida de vegetación, pero hay que tomar en cuenta que esta zona de bosque tropical seco está habituado a este tipo de sequías y va a sobrevivir. En pocos años la inmensa mayoría del paisaje estará como estaba”, aseguró.
El objetivo del trabajo de su equipo es dar respuesta urgente a la emergencia, facilitar la coordinación y cooperación de las brigadas que llegaron de Francia, Austria, Bélgica, Suecia y otros para su correcta distribución.
“La misión del equipo es facilitar la coordinación que las autoridades bolivianas a fin de que solo tengan un interlocutor, que solo hablen con nosotros para que nos comuniquemos con los países que envían ayuda y así sea más efectiva. Muchos interlocutores solo van a complicar la ayuda que estamos brindando”, explicó.
Este equipo está conformado por ocho personas, dos de ellas a cargo de las comunicaciones y el enlace para remitir decisiones y recibir información de lo que se recibe de otros países, y seis centradas en la coordinación y el análisis del comportamiento del fuego para establecer si es que amerita mayor cooperación.
Ayuda
Mientras tanto, la ayuda sigue llegando al país para sofocar los incendios en la Chiquitanía. Ayer arribó de Colombia un avión con material para combatir el fuego.