Crece la frontera agrícola en el Chaco para biocombustible
El concejal del Chaco, Mario Cavero, informó que el personal de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) tuvo varios acercamientos con el sector productivo de maíz y soya en la Región Autónoma para aumentar la frontera agrícola por el tema de los biocombustibles. “En el...
El concejal del Chaco, Mario Cavero, informó que el personal de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) tuvo varios acercamientos con el sector productivo de maíz y soya en la Región Autónoma para aumentar la frontera agrícola por el tema de los biocombustibles.
“En el Chaco ya entró la producción extensiva a zonas que no son aptas para ello. Es decir, que son tierras forestales que se han reforestados. Todos los estudios nos advierten que en 30 años más vamos atener desiertos allí. El que está como productor hoy, maximiza las ganancias utilizando agroquímicos que contamina los reservorios de agua”, manifestó.
La incongruencia del gobierno nacional sobre el discurso “pachamamista” fue criticada desde distintos sectores. El ingreso de las petroleras a reservas protegidas, el crecimiento de la frontera agrícola para cultivos de maíz y soya, la reforestación son prácticas que desequilibran los ecosistemas.
El Gobierno autorizó la utilización de soya transgénica para utilizar en la producción exclusiva de biodiésel, esto en una reunión con empresarios en Santa Cruz a principio de abril. Según el Gobierno, están disponibles alrededor de 4.000.000 de hectáreas para procesar dicho combustible.
La fecha de comercialización de este producto no fue anunciada. Se procederá inicialmente con la promulgación de decretos que incentiven un precio competitivo. El proyecto demandará 2.000.000 de dólares para una compra de 100.000.000 de litros de biodiesel.
Hace algunos días atrás las Organizaciones de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) a través de su representante en Bolivia, Theodor Friedrich calificó de fatal, la decisión del Gobierno boliviano, de apostar a los biocombustibles, ya que considera que no se ayuda a la seguridad alimentaria, al medio ambiente, ni al cambio climático.
Friedrich advirtió que las consecuencias de habilitar tierras para los biocombustibles conllevan la degradación del medio ambiente, mayor afectación de las áreas forestales y más cambio climático.
“En el Chaco ya entró la producción extensiva a zonas que no son aptas para ello. Es decir, que son tierras forestales que se han reforestados. Todos los estudios nos advierten que en 30 años más vamos atener desiertos allí. El que está como productor hoy, maximiza las ganancias utilizando agroquímicos que contamina los reservorios de agua”, manifestó.
La incongruencia del gobierno nacional sobre el discurso “pachamamista” fue criticada desde distintos sectores. El ingreso de las petroleras a reservas protegidas, el crecimiento de la frontera agrícola para cultivos de maíz y soya, la reforestación son prácticas que desequilibran los ecosistemas.
El Gobierno autorizó la utilización de soya transgénica para utilizar en la producción exclusiva de biodiésel, esto en una reunión con empresarios en Santa Cruz a principio de abril. Según el Gobierno, están disponibles alrededor de 4.000.000 de hectáreas para procesar dicho combustible.
La fecha de comercialización de este producto no fue anunciada. Se procederá inicialmente con la promulgación de decretos que incentiven un precio competitivo. El proyecto demandará 2.000.000 de dólares para una compra de 100.000.000 de litros de biodiesel.
Hace algunos días atrás las Organizaciones de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) a través de su representante en Bolivia, Theodor Friedrich calificó de fatal, la decisión del Gobierno boliviano, de apostar a los biocombustibles, ya que considera que no se ayuda a la seguridad alimentaria, al medio ambiente, ni al cambio climático.
Friedrich advirtió que las consecuencias de habilitar tierras para los biocombustibles conllevan la degradación del medio ambiente, mayor afectación de las áreas forestales y más cambio climático.