Brasil: Lula da Silva reitera que es inocente
El ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva ratificó el jueves su inocencia y calificó de farsa las acusaciones que penden sobre él por supuestos actos de corrupción, durante un interrogatorio que enfrentó en la Justicia Federal de Paraná. ‘En el primer proceso que he sido...
El ex presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva ratificó el jueves su inocencia y calificó de farsa las acusaciones que penden sobre él por supuestos actos de corrupción, durante un interrogatorio que enfrentó en la Justicia Federal de Paraná.
‘En el primer proceso que he sido víctima es una farsa, una mentira del Ministerio Público, con Power Point. La segunda es otra farsa, estoy pagando ese precio. Voy a pagar porque soy un hombre que creo en Dios, en la justicia y un día la verdad va a prevalecer sobre lo que está pasando’, afirmó durante la audiencia.
Por vez primera en siete meses, el Lula abandonó la Policía Federal en Curitiba y se trasladó para la sede judicial para responder al interrogatorio de la jueza Gabriela Hardt, quien sustituye temporalmente al magistrado Sérgio Moro en las investigaciones de la operación Lava Jato sobre actos de corrupción.
Designado ministro de Justicia por el presidente electo, Jair Bolsonaro, Moro fue quien condenó a Lula y lo encerró el 7 de abril para que cumpliera una pena 12 años y un mes por presunta corrupción pasiva y lavado de dinero.
Entre preguntas y cierta tirantez en la sala, el ex mandatario manifestó sentirse como un trofeo, ‘un trofeo que la Lava Jato precisaba entregar. No sé por qué no les gusto, pero yo era un trofeo que necesitaban entregar’.
Negó cualquier vínculo sobre aparentes transformaciones hechas a una hacienda en Atibaia, interior de Sao Paulo, atribuida de facto a él y que habrían sido pagadas por empresas constructoras entre 2010 y 2014 a cambio de contratos con la compañía Petróleo Brasileiro S.A. (Petrobras).
‘En el primer proceso que he sido víctima es una farsa, una mentira del Ministerio Público, con Power Point. La segunda es otra farsa, estoy pagando ese precio. Voy a pagar porque soy un hombre que creo en Dios, en la justicia y un día la verdad va a prevalecer sobre lo que está pasando’, afirmó durante la audiencia.
Por vez primera en siete meses, el Lula abandonó la Policía Federal en Curitiba y se trasladó para la sede judicial para responder al interrogatorio de la jueza Gabriela Hardt, quien sustituye temporalmente al magistrado Sérgio Moro en las investigaciones de la operación Lava Jato sobre actos de corrupción.
Designado ministro de Justicia por el presidente electo, Jair Bolsonaro, Moro fue quien condenó a Lula y lo encerró el 7 de abril para que cumpliera una pena 12 años y un mes por presunta corrupción pasiva y lavado de dinero.
Entre preguntas y cierta tirantez en la sala, el ex mandatario manifestó sentirse como un trofeo, ‘un trofeo que la Lava Jato precisaba entregar. No sé por qué no les gusto, pero yo era un trofeo que necesitaban entregar’.
Negó cualquier vínculo sobre aparentes transformaciones hechas a una hacienda en Atibaia, interior de Sao Paulo, atribuida de facto a él y que habrían sido pagadas por empresas constructoras entre 2010 y 2014 a cambio de contratos con la compañía Petróleo Brasileiro S.A. (Petrobras).