Hasta octubre se instalará un radar en la frontera de Tarija
Se prevé que hasta octubre se instale un radar civil en la frontera de Tarija, así lo ha confirmado el Ministerio de Defensa a este medio. Por otro lado, la Aduana Nacional espera una reunión de coordinación con el Viceministerio de Lucha Contra el Contrabando, la cual permita un trabajo...
Se prevé que hasta octubre se instale un radar civil en la frontera de Tarija, así lo ha confirmado el Ministerio de Defensa a este medio. Por otro lado, la Aduana Nacional espera una reunión de coordinación con el Viceministerio de Lucha Contra el Contrabando, la cual permita un trabajo óptimo de control.
El año pasado se entregó un radar en El Alto y a principios de 2018 en Santa Cruz. En cuatro meses más se tendrá otro en Tarija y en Beni, pero hasta fin de año se instalarán dos más en otros puntos del país. El objetivo es controlar el espacio aéreo boliviano. También se tiene previsto que los radares militares estén listos hasta el primer semestre del 2019.
El ministro de Defensa, Javier Zavaleta, sostuvo que hay radares móviles, civiles y militares que estarán en todo el territorio boliviano. Estos ayudarán en el tema comercial, pues con los equipos se tendrá certeza de qué aviones transitan por espacio aéreo boliviano, con ello hacer el cobro respectivo, como se hace a nivel internacional. Por otro lado está el tema de seguridad, en lo que refiere a narcotráfico o crimen organizado se podrá localizar, interceptar y hasta derribar cualquier aeronave que sea peligrosa para el Estado.
Cada dispositivo iniciará sus operaciones gradualmente debido a que, una vez instalado, hay un período de aproximadamente un mes y medio en el que se efectúan las pruebas de los sistemas, luego se realizan vuelos de calibración para afinar los sensores. Al concluir este procedimiento recién se operará oficialmente.
La empresa Thales, que es la proveedora de los radares, informó que estos dispositivos se caracterizan por establecer una medición de tiempo que permite calcular la velocidad de un avión y en cuánto llegará a determinado punto, a diferencia de los otros seis radares civiles que conforman los 13 adquiridos por el Estado Plurinacional para fortalecer el control del espacio aéreo boliviano.
La presidenta de la Aduana Nacional, Marlene Ardaya, manifestó que esta implementación también será de beneficio para su institución. De acuerdo a decreto deben tener una coordinación estrecha con el Viceministerio de Lucha Contra el Contrabando. A 50 kilómetros de frontera actuarán las fuerzas armadas y la policía en una acción conjunta. La Aduana estará en zonas secundarias y primarias; ésta última debe entenderse como el punto de ingreso en las fronteras y la otra en los caminos habilitados.
“Debería ser los 50 kilómetros que corresponde de la tranca en todo el territorio nacional. Pero de hecho, la Aduana permanecerá en algunos puntos de control todavía, aunque están sujetos a evaluación en todo este tiempo-comentó la funcionaria-. El viceministro anunciará la estrategia, pero inicialmente ese sería el planteamiento”.
El personal que manejará los radares será especializado
Los controladores y operadores deberán capacitarse para conocer al detalle el sistema de tecnología de última generación. Se programó que este personal reciba instrucción en tres pilares: teoría, simulación y operación.
La empresa Thales comunicó que los profesionales deberán vencer dos niveles: uno como operador convencional en el que aprenderán a leer la información que transmite el radar, y otro como controlador de radar, en el que recibirán instrucción para dirigirla hacia una ubicación específica. Según especifica la página del Ministerio de Defensa.
Para el manejo de los radares militares y civiles, cuatro militares y cuatro funcionarios de Aasana (administrador aeroportuario boliviano), viajaron a Francia para recibir una capacitación avanzada sobre esos sistemas, quienes ahora tienen que transmitir sus conocimientos al resto del personal que conformará el equipo de operadores y controladores de los dispositivos.
Thales trajo a Bolivia equipos de simulación para que el personal pueda realizar sus prácticas.
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El año pasado se entregó un radar en El Alto y a principios de 2018 en Santa Cruz. En cuatro meses más se tendrá otro en Tarija y en Beni, pero hasta fin de año se instalarán dos más en otros puntos del país. El objetivo es controlar el espacio aéreo boliviano. También se tiene previsto que los radares militares estén listos hasta el primer semestre del 2019.
El ministro de Defensa, Javier Zavaleta, sostuvo que hay radares móviles, civiles y militares que estarán en todo el territorio boliviano. Estos ayudarán en el tema comercial, pues con los equipos se tendrá certeza de qué aviones transitan por espacio aéreo boliviano, con ello hacer el cobro respectivo, como se hace a nivel internacional. Por otro lado está el tema de seguridad, en lo que refiere a narcotráfico o crimen organizado se podrá localizar, interceptar y hasta derribar cualquier aeronave que sea peligrosa para el Estado.
Cada dispositivo iniciará sus operaciones gradualmente debido a que, una vez instalado, hay un período de aproximadamente un mes y medio en el que se efectúan las pruebas de los sistemas, luego se realizan vuelos de calibración para afinar los sensores. Al concluir este procedimiento recién se operará oficialmente.
La empresa Thales, que es la proveedora de los radares, informó que estos dispositivos se caracterizan por establecer una medición de tiempo que permite calcular la velocidad de un avión y en cuánto llegará a determinado punto, a diferencia de los otros seis radares civiles que conforman los 13 adquiridos por el Estado Plurinacional para fortalecer el control del espacio aéreo boliviano.
La presidenta de la Aduana Nacional, Marlene Ardaya, manifestó que esta implementación también será de beneficio para su institución. De acuerdo a decreto deben tener una coordinación estrecha con el Viceministerio de Lucha Contra el Contrabando. A 50 kilómetros de frontera actuarán las fuerzas armadas y la policía en una acción conjunta. La Aduana estará en zonas secundarias y primarias; ésta última debe entenderse como el punto de ingreso en las fronteras y la otra en los caminos habilitados.
“Debería ser los 50 kilómetros que corresponde de la tranca en todo el territorio nacional. Pero de hecho, la Aduana permanecerá en algunos puntos de control todavía, aunque están sujetos a evaluación en todo este tiempo-comentó la funcionaria-. El viceministro anunciará la estrategia, pero inicialmente ese sería el planteamiento”.
El personal que manejará los radares será especializado
Los controladores y operadores deberán capacitarse para conocer al detalle el sistema de tecnología de última generación. Se programó que este personal reciba instrucción en tres pilares: teoría, simulación y operación.
La empresa Thales comunicó que los profesionales deberán vencer dos niveles: uno como operador convencional en el que aprenderán a leer la información que transmite el radar, y otro como controlador de radar, en el que recibirán instrucción para dirigirla hacia una ubicación específica. Según especifica la página del Ministerio de Defensa.
Para el manejo de los radares militares y civiles, cuatro militares y cuatro funcionarios de Aasana (administrador aeroportuario boliviano), viajaron a Francia para recibir una capacitación avanzada sobre esos sistemas, quienes ahora tienen que transmitir sus conocimientos al resto del personal que conformará el equipo de operadores y controladores de los dispositivos.
Thales trajo a Bolivia equipos de simulación para que el personal pueda realizar sus prácticas.
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